Nostalgia del 99

Desde los Mundiales de Atletismo, hace ya once años, que el Estadio Olímpico de La Cartuja no recibe eventos tan importantes vinculados este deporte. El recinto mantiene su actividad gracias a  la actividad empresarial y a los conciertos que allí se celebran.

Giraldillo fue la mascota de Sevilla'99

Agosto de 1999. Sevilla estaba exultante, feliz por sentirse el centro del mundo por unos días. La ciudad esperaba preparada la celebración del Campeonato del Mundo de Atletismo, una vez disputados un mes antes y con éxito los de España, que sirvieron para inaugurar La Cartuja.

Por ser la primera, nadie habría dicho entonces que aquella sería la única ocasión en la que el Estadio Olímpico se sentiría plenamente realizado, albergando una competición de atletismo, el deporte que dio realmente sentido a tan faraónica construcción.

120 millones de euros y más de una década después, el tercer estadio de España en aforo, tras el Camp Nou y el Bernabéu, se erige en un edificio tan imponente como inerte, acorde con el panorama de la Isla de La Cartuja. Sus 57.619 plazas permanecen vacías día a día, año tras año. Ni siquiera el fútbol ha podido salvar al estadio olímpico del ostracismo. Sevilla y Betis ya estudiaron unificar su sede allí, en una decisión impopular que no prosperó, pese a las jugosas condiciones económicas en juego. El de los dos equipos de fútbol principales de la ciudad es sólo un ejemplo de aquellos proyectos abortados o sin garantía de futuro que se emprendieron, en una época de especulación que está fuera de lugar en los tiempos que corren.

De vuelta a la dimensión deportiva, las competiciones atléticas en el Olímpico subsistieron gracias a las ediciones anuales del Meeting de Sevilla, disputado a partir del año 2000, tras la apertura del estadio. Siete años duró la moda del atletismo en Sevilla: el año del campeonato mundial y seis de mítines. Un proyecto que ha tenido poca continuidad. Las pruebas se pasaron a Huelva en 2005, con el apodo de ‘Meeting Iberoamericano’, y hasta hoy.

Gala de inauguración del Mundial de Atletismo de 1999

Desde entonces, la vinculación del estadio olímpico de La Cartuja con el atletismo se ha visto reducida prácticamente a la Maratón Ciudad de Sevilla, a la Media Maratón Isla de La Cartuja y a competiciones populares como la carrera nocturna, que cada edición incrementa en varios miles el número de participantes. Eventos esporádicos que se valen, una vez al año, de las privilegiadas instalaciones del recinto.

A excepción de la Real Federación Española de Atletismo (RFEA), que ha organizado pruebas clasificatorias esporádicas en el último lustro, el resto de actividades deportivas han estado relacionadas con el fútbol, la otra baza con la que cuenta el estadio olímpico. Tampoco el deporte rey por excelencia ha logrado atar ningún compromiso a largo plazo que devuelva al edificio el prestigio que merece. Todos los años se especula con traer a Sevilla la final de la Copa del Rey o partidos de la Selección pero, finalmente, nunca sucede. La final de la Copa de la UEFA en 2003 y, sobre todo, el triunfo de la selección española en la Copa Davis, han sido los otros acontecimientos destacados.

Más allá de la memoria deportiva, la actividad cotidiana del estadio la salva el mundo empresarial: desde un hotel, una cafetería, una tienda de deportes… hasta un centro de hemodiálisis, varias dependencias de la Junta de Andalucía y la sede del Instituto Municipal de Deportes.

Hoy en día, la parada de bus apenas es solicitada. Los sevillanos comienzan a relacionar el estadio de La Cartuja con la música. Conciertos de toda clase, últimamente con artistas de relevancia internacional, como Madonna, AC/DC, U2…  pueden considerarse ensayos para que el Olímpico no desespere y se siga entrenando, luchando por hacerse un nombre definitivamente en el deporte y volver a completar su aforo con algún campeonato como aquel del 99.
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Autor: Abel Moreno Peña
Fuentes: http://www.eosevilla.com/ (Estadio Olímpico de La Cartuja), rfea.es, wikipedia